Aporte del Humanismo a la tarea diagnóstica
Resumen
Este artículo se refiere a que los profesionales de la salud, al hacer un diagnóstico, creen que deben describir, en términos «objetivos», el padecimiento de alguien. Todo diagnóstico es un recorte posible sobre la realidad de un Tú, realidad cuya subjetividad cubre, y la subjetividad del profesional intentará descubrir. Desde el humanismo, el diagnóstico pasa por tres momentos: a) el genérico (si esta persona está sana o enferma). Involucra una definición de salud; b) si la persona tiene restringida alguna o todas las libertades que lo definen desde la salud, se interroga:
¿de qué está enferma?, ¿por qué sufre?, ¿por qué ahora y aquí?; y c) momento de la personificación, se llega si se partió de un encuentro intencional con el otro. Cuando esta relación sujeto-sujeto está mediada por las técnicas auxiliares de diagnóstico, con su supuesta «objetividad», deben ser neutralizadas por la comprensión del sentido, desde un Tú a un Tú.